lunes, 23 de febrero de 2009

El Grupo

No soy un gran admirador de la filosofía de Aristóteles ni de la de su maestro Platón. A pesar de sus grandes contribuciones me pueden los prejuicios de ver como muchas de sus ideas equivocadas lastraron el desarrollo humano durante siglos. Y más cuando contemporáneos suyos ya fueron capaces de darse cuenta de verdades que no serían redescubiertas hasta el renacimiento.

Sin embargo tengo que reconocer que siempre hubo una teoría de Aristóteles que siempre me fascinó. Su consideración del hombre como “zoon politikon”, o hombre como animal social, me parece muy interesante.

Por mucho que prediquemos nuestra individualidad, nuestra libertad y nuestra capacidad de raciocinio, el ser humano sigue siendo un animal tribal tal y como lo lleva siendo durante millones de años. El grupo nos protege, nos da confianza, nos ayuda a sentirnos mejor. Esto no sorprenderá a nadie, los casos de personas que se ven arrastrados por grupos religiosos o ideológicos extremos no son extraños en nuestra sociedad. Sin embargo siempre me ha impresionado hasta que punto esto es cierto. Y es que creo que no somos del todo conscientes del impacto que tiene la sociedad en nosotros y hasta donde la no-pertenencia al grupo puede despertar un odio totalmente irracional. Compatriota-Extranjero, [Ponga aquí su religión favorita]-infiel, popular-socialista, amigo-enemigo. Cualquier escusa es buena para excluirte de mi grupo.

Porque no lo olvides: tú no perteneces a mi grupo, nunca lo harás y yo siempre seré mejor que tú.

lunes, 16 de febrero de 2009

Lo que vende vende (II)

Siguiendo la estela del año pasado , uno de los días mas "exitosos" de este humilde blog, nos sumamos a Jotace y su Big Culo Day 2009.
Si el año pasado teníamos a Milo Manara, este año tenemos con nosotros otro dibujante capaz de engatusar a las necesitadas masas de hombres: Frank Cho. Este genial artista estadounidense es conocido sobretodo por su tira Liberty Meadows, la cual os recomiendo encarecidamente a todos.

Y ahora lo que estabas deseando ver, una muestra de su "trabajo".





sábado, 14 de febrero de 2009

Momento

Resulta que, después de más de dos mil años, Platón va a tener razón. He estado durante un día entero dándole vueltas a un artículo que quería escribir. Lo tenía todo: la estructura, el estilo, las sutilezas. Ya estaba escrito. Sin embargo ha sido ponerme delante del teclado durante dos horas y lo único que he logrado han sido tres líneas dignas de un estudiante salido del genial sistema educativo español.

En mi mundo de las ideas todo sonaba perfecto. Todo tenía su razón de ser. Todo era ideal. Luego, en el mundo real, es muy duro darse cuenta de que en realidad lo que puedes escribir, no es que no sea perfecto, es que no se puede considerar ni medianamente aceptable.

Hay una frase preciosa de Ariel Rot que dice: “los sueños que no puedo recordar son como las canciones que no pude componer”. Para mí es importantísima porque muestra perfectamente ese sentimiento de perdida tan profundo cuando olvidas una idea genial que, probablemente, jamás recuerdes.

Algo así ocurre con la vida. Tanto tiempo gastado en pensar, planear algo para cuando por fin surge la oportunidad nada salga como tú quieres y en lo único que puedas pensar es en ese momento que tanto quisieras recuperar y nunca volverá.