martes, 12 de junio de 2007

La política del engaño (o como todo sigue igual)

Bush lo ha logrado. Si algo hay que reconocerle es que es muy inteligente, o al menos sus asesores. Me sentí muy esperanzado cuando escuche que la alemana Angela Merkel iba a intentar obtener un compromiso acerca del Cambio Climático en la reunión del G-8. Algo esta cambiando, me dije, pero está visto que no lo suficientemente rápido. ¿Y como responde Bush? Saliéndose por la tangente, llegó a la cumbre con una alerta mundial, quería instalar un escudo antimisiles en Europa del Este, esto molestó a Rusia y ya teníamos conflicto. ¿A quien le importa el Cambio Climático cuando se huele otra Guerra Fría?

Pero todos tranquilos al día siguiente se podían leer en muchos periódicos titulares como estos:

"Acuerdo en cambio climático" en el G8

Europa arranca a EE UU un decisivo compromiso sobre cambio climático

Presidentes del G8 se comprometen a frenar el cambio climático

Me pongo a investigar por ahí y capto la verdad. En esta noticia en el País dicen:

“No obstante, Merkel ha reconocido que el acuerdo ha sido posible gracias a la formulación "toman seriamente en consideración"”

No se vosotros pero a mí eso me parece un tomadura de pelo. Así mismo, también añaden que lo discutirán en la cumbre de la ONU, no se porque pero creo que ya se como acabara esa discusión. Si llevan 10 años posponiendo esa decisión, ¿creéis que ahora de repente lo va a hacer? Yo no.

Y si así marchan las cosas en el ámbito internacional, en el nacional no andan menos revueltas. Tras el comunicado de ETA, parece que los dos grandes partidos se han calmado un poco pero no creo que dure. ETA es una veta demasiado valiosa. Habiendo unas elecciones tan pronto, la perspectiva del poder lo hace muy sugerente. Poniendo a la banda terrorista en el primer plano de los debates se le concede algo que no tiene: relevancia. Si Rajoy sigue repitiendo lo poderosa que es, seguramente hasta él se lo termine creyendo.

Y no es casualidad que haya mezclado estos dos temas tan, aparentemente, diferentes. Yo veo un punto en común muy fuerte: el despiste. Mediante estos conflictos como el de ETA o el del escudo antimisiles se desvía la atención de los temas que realmente nos deberían importar como el Cambio Climático, el bienestar de la gente o cuánto y cómo nos están robando.

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